25 septiembre, 2009

Volver de tres días de retiro, y sentir que volví a nacer. Empezé a creer de nuevo en mi. A valorar. Valorar lo que tenés al lado. Tu vida cotidiana, la rutina, que hace lo más esencial de tu cámino. Tu vida es hermosa, no la dejés pasar. No dejes de aprovechar los momentos. Momentos para reir, bailar, cantar, otros para llorar, abarazar, besar. Estás acompañada. No estás sola en esta. Estás saliendo de a poco a flote. Pie a pie. Mirar con la mirada, y no con los ojos. Mirar desde otro punto de vista. Abriendo los ojos a la vida. Sacate la armadura, soltate. Canta para ser feliz. Llorá en mi hombro, pero llorá.

No hay comentarios: